Por Damaso Adames
España descubre América con la llegada a la Hispaniola, habitada por aborígenes (NO AFRICANOS), el trabajo intenso, las enfermedades y los abusos redujeron al mínimo los nativos de la isla, posteriormente para poder hacer minería se trajeron negros de áfrica, surgió el contrabando por la parte oeste de la isla y en el 1605 el gobernador OSORIO acato la medida (¡¡¡estúpida!!!) de la corona española, de dejar abandonada la parte oeste de la isla.
En realidad, esa es la causa que da origen a que se iniciara un proceso paralelo de desarrollo de otra sociedad, en la que se asentaron corsarios y filibusteros, que junto a los bucaneros fueron conformando una población a la que posteriormente se le unieron negros cimarrones; se formó una colonia francesa de plantaciones y finalmente en un proceso de siglos se convirtió en AITÍ.
Esa fue la colonia más rica del mundo que aportaba al imperio Frances una riqueza enorme,
Haití compra su independencia en 1804 luego de la barbarie cometida, nos invade en 1822, básicamente con el objetivo de obtener los recursos de pagar su libertad, por eso depredaron el sur dominicano que eran grandes extensiones de caoba que hoy se observan en los grandes palacios de Francia.
De los países conquistados por España somos la excepción pues no nos independizamos de España si no de Haití, ya que España nos había abandonado.
Nunca aceptaron la independencia de «Los pueblos del Este», como se nos llamaba a pesar de todas las diferencias abismales que ambos pueblos tenemos como lo son: El idioma, la religión, las costumbres, la sociología; por esa negación nos invadieron mínimo 14 veces desde 1844 hasta 1856.
Hasta bien entrado el siglo 20 la constitución haitiana decía que este territorio les pertenecía, mensaje luego eliminado de su carta magna pero posicionado en la psiquis de ese conglomerado, que se enseña con el “Manual de Historia de Aiti”, “La dominicanie es provincia rebelde de Aiti” escrito por el historiador Justino Crisóstomo Doirsanville; todo eso complicado con las teorías de superioridad racial de Jean Price Mars, personaje que nos odiaba por ser mestizos igual a la casta que los gobierna.
Por la situación geográfica en la que no existe una frontera física entre ambos países desde 1929 las leyes de la República Dominicana le niegan la nacionalidad a los hijos de los extranjeros que no tienen domicilio formalizado legalmente en el país y a los hijos de los diplomáticos también.
Esa modificación se realizó en el gobierno de Horario Vásquez y Lajara en 1929. Estas razones de tipo geográfico-histórico hacen que nuestro régimen de otorgamiento de la nacionalidad es JUS-SANGUINI; combinado con jus-soli para los nacidos de inmigrantes LEGALES en nuestro territorio.
Haití es una nación fallida sin registro civil para conocer sobre el nacimiento de sus nacionales; lo es también desde el punto de vista de sus recursos naturales con una cubierta boscosa de menos de un 2%, sin producción y con una casta dominante que tiene profundas diferencias de racismo con sus propios nacionales ya que gobiernan los mestizos y la mayoría en Aiti es negra 95%, el 90% de las casas cocinan en Aiti con carbón generado de los bosques dominicanos.
Si nuestro sistema de otorgar la nacionalidad fuera igual que el norteamericano, en menos de 30 años desapareceríamos como nación, ya que el 40% de los nacimientos en nuestro país son de haitianas que no tienen hospitales en su país, existen poblados fronterizos donde las escuelas han cerrado porque más del 90% de la población es haitiana.
Recordemos que está en juego nuestra supervivencia como nación, piénsalo.
¿Todo el nacido aquí puede ser dominicano?